La mística es una inmersión en las profundidades del alma y en la realidad última. El mundo que se ofrece a nuestros sentidos o que descubrimos mediante nuestra reflexión es, para la mística islámica, parábola, sólo parábola. No es la "realidad". Es sólo signo, referencia, no lo realmente verdadero. Es parabólico, no real. El místico es quien deja atrás lo parabólico y se mete de lleno en la realidad y, por tanto, abandona también los caminos en los que se hace accesible lo parabólico para tomar la senda de la realidad. La mística es "experiencia de la realidad", experiencia del Dios uno y ...